RANCAGUA: La noche de este viernes y pese al estado de catástrofe decretado por el Presidente de la República, Sebastián Piñera, funcionarios de Carabineros fiscalizaron un lugar en el que se había convocado una «Virus Party».
La policía pudo reaccionar gracias a una denuncia ciudadana, la que alertó a través de las redes sociales que se estaba convocando a un evento en esa ciudad, sin tener consideración alguna con la cuarentena preventiva por la propagación del Coronavirus.
Fue así que Carabineros inició una investigación para dar los organizadores y el lugar de la fiesta -lo que se mantenía en secreto-, con la finalidad de prevenir la reunión de gente en un espacio reducido, más en un momento tan delicado para la salud pública.
El mayor Jorge Zuñiga, comisario de la capital o’higginiana, declaró que “aproximadamente a las 23:30 horas se recibió información de que se iba a realizar una fiesta privada que se estaba organizando por las redes sociales bajo un logo de virus party, por lo cual Carabineros dio con la ubicación del lugar, se entrevistó con las personas que estaban organizando dicho evento, en la cual al momento de la fiscalización solamente se encontraban las 4 personas”.
Señaló que debieron explicarle a las personas que “no podían realizar este tipo de eventos, por el estado de excepción y la contingencia nacional debido al virus y que era altamente probable que se iniciara una propagación, por lo cual se le indicó que se podía proceder a su detención en caso de que insistieran en llevar la fiesta a cabo”.
El comisario, manifestó que tras el llamado de atención la fiesta no se realizó y tampoco se detectó algún tipo de ventas clandestinas de bebidas alcohólicas.