Una macabra sorpresa se llevó el conductor de una retroexcavadora la tarde del pasado viernes luego que las labores de movimiento de tierra que realizaba en el patio su casa -en la población Eucaliptus- se vieran interrumpidas con la aparición de restos óseos atribuibles a un feto de cerca de siete meses de gestación.
Según informó el jefe de Carabineros de Curepto, teniente Óscar Sánchez, el inesperado hallazgo quedó al descubierto luego que el operador del vehículo pesado extrajera en la pala una bolsa enterrada que contenía el pequeño cadáver lo que motivó solicitara por teléfono la inmediata presencia de personal uniformado de dicha unidad, los cuales tras entrevistarse con el denunciante constataron el hecho y aislaron el sitio del suceso dando cuenta de lo acontecido a la fiscalía de Licantén, quien determinó la concurrencia de equipos especializados de la Policía de Investigaciones (PDI).
En el lugar los peritos del Laboratorio de Criminalística y de la Brigada de Homicidios de Talca además de recabar antecedentes con el propietario de la vivienda, efectuaron fijaciones fotográficas y diversas indagaciones, entre las que se cuenta una visita al Hospital de Curepto para interiorizarse si tenían registro entre las consultas de personas con síntomas atribuibles a un posible aborto, lo que fue descartado.
El feto una vez retirado fue traslado al Servicio Médico Legal de Talca con el fin de someterlo a los análisis forenses correspondientes que permitan establecer su causa de deceso y así identificar a la o los responsables de tan condenable crimen. Si se logra acreditar que se trató de un delito de interrupción del embarazo los culpables arriesgan penas de cárcel que van desde los tres y hasta los quince años.
La Fiscalía Regional confirmó que el caso generó la apertura de una investigación que se encuentra en curso y sobre la cual declinaron entregar mayores detalles para asegurar el éxito de las diligencias en desarrollo.
Fuente: TV Más Curepto