Los antimicrobianos son medicamentos que se utilizan para tratar las infecciones de origen bacteriano, esenciales para preservar la salud humana, la sanidad animal, y su uso es fundamental para garantizar la seguridad de los alimentos.
El Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) hace un llamado al buen uso de este tipo de medicamentos, ya que al ser bien utilizados pueden ser de gran ayuda. “Un uso excesivo, continuo o indebido de estos medicamentos supone una amenaza cada vez mayor para la salud pública mundial y la única forma de preservar la eficacia de estos valiosos fármacos en los animales, es garantizar un uso responsable y correcto del medicamento y sólo cuando sea necesario;respetando la dosis, frecuencia y la duración, que va de la mano con las normas internacionales de la Organización Internacional de Sanidad Animal, OIE”, explicó el director regional del Servicio en el Maule, Fernando Pinochet.
Enmarcado en esta estrategia, el Servicio Agrícola y Ganadero mantiene en su normativa la regulación de medicamentos veterinarios en la actividad pecuaria, en lo relativo a su registro, comercialización y uso de antimicrobianos. Esto se complementa con acciones de difusión apoyadas en publicaciones como es el caso del volante “Médico Veterinario: Actor clave en el uso prudente y responsable de los antimicrobianos” y el díptico “Notificación de efectos adversos por parte de los médicos veterinarios”, entregando directrices de cuándo y cómo deben utilizarse estos productos, de qué manera hacer seguimiento en los tratamientos establecidos en cada caso y los posibles efectos no deseados, así como también el establecimiento de la responsabilidad en la indicación de tratamiento, compra, venta y uso de medicamentos veterinarios.
En este sentido, el Encargado Regional de Protección Pecuaria del SAG, Andrés Arbizu, señaló que “el uso de antibióticos en animales es muy superior al consumo humano y desde hace muchos años no se han descubierto nuevos tipos de antibióticos. Por eso es importante que se haga un uso correcto de ellos a través de los informativos que posee el Servicio, para así evitar resistencias”, indicó.
La resistencia a los antimicrobianos (RAM) se desarrolla de forma natural a lo largo del tiempo y se produce cuando los microbios (bacterias, virus, parásitos y hongos) desarrollan una resistencia a los medicamentos que antes podían combatirlos, lo que hace que el tratamiento sea menos eficiente o completamente ineficaz, situación que se ha podido observar con mayor fuerza durante las últimas décadas y pone en riesgo el control de enfermedades en todo el mundo, ya que la resistencia a los antimicrobianos constituye un problema común a la sanidad animal y a la salud humana.
OIE
La OIE lleva más de diez años trabajando en el tema de los productos de uso veterinario y ha elaborado una estrategia sólida para tal fin. En noviembre de 2016 publicó la estrategia sobre la resistencia y el uso prudente de los antimicrobianos, alineada con el plan de acción mundial de la OMS de dar un enfoque de “Una Sola Salud”, que considera las necesidades de la salud humana, la sanidad animal, la agricultura y el medio ambiente.
Por lo anterior, tanto la OIE como el SAG llaman a hacer un uso responsable y prudente de los antimicrobianos en animales terrestres, de tal forma que se preserve su eficacia terapéutica, transformándose en una responsabilidad de todos los sectores.